El estado de Querétaro, conocido por su industria sostenible, ha inaugurado con éxito la primera fábrica de hidrógeno verde de México, marcando un logro importante en la cooperación empresarial entre México y Alemania.
El proyecto es una colaboración entre la empresa alemana Gerresheimer, que produce vidrio farmacéutico para empaques de medicamentos en México, y la empresa mexicana Cryoinfra, productora de gases criogénicos, con una inversión conjunta de 100 millones de pesos (aproximadamente 5,3 millones de dólares), destinada a promover la reducción de emisiones de carbono, fomentar el desarrollo económico circular y abrir caminos para la aplicación de tecnologías de nueva energía.










