Shell anunció su salida del negocio de energía eólica marina en EE.UU., transfiriendo el 50% de sus acciones en el proyecto Atlantic Shores completamente a su socio, Electricité de France. Esta decisión marca un ajuste en los negocios de Shell en el campo de la energía eólica marina en EE.UU., reflejando una reestructuración en su estrategia de energía eléctrica.
Shell declaró: "Esta decisión se alinea con la estrategia de energía eléctrica de Shell. Continuaremos maximizando el valor de la plataforma, mejorando la calidad de la cartera de activos, pasando de proyectos de generación intensivos en capital a activos que apoyen nuestras fortalezas en trading y retail".
En agosto de 2024, los reguladores de Nueva Jersey aprobaron la solicitud de Shell y Electricité de France para cancelar el acuerdo de compra de energía de 1.500 megavatios de la primera fase del proyecto. Este ajuste en el proyecto de energía eólica marina ocurre en el contexto de la transformación continua de la industria energética global, donde las empresas energéticas están optimizando sus estructuras comerciales según las condiciones del mercado.
La decisión de Shell de salir del mercado de energía eólica marina en EE.UU. afectará el diseño de desarrollo de energías renovables locales. La compañía indicó que continuará enfocándose en áreas con ventajas competitivas, y este ajuste comercial es parte de su reestructuración estratégica global.










