Una planta de generación de hidrógeno verde ubicada en Utah, Estados Unidos, ha entrado en operación. Esta instalación, impulsada por el departamento de servicios públicos de la ciudad de Los Ángeles, busca utilizar hidrógeno verde para el almacenamiento de energía a largo plazo, con el fin de apoyar la operación estable de la red eléctrica, y representa una práctica para explorar la aplicación a escala de hidrógeno en el sistema eléctrico.
La planta está diseñada para generar electricidad mediante combustible de hidrógeno y cuenta con almacenamiento de hidrógeno en cavernas de sal subterráneas. Su modo de operación busca abordar la intermitencia de la generación de energías renovables: producir y almacenar hidrógeno cuando la generación solar y eólica es abundante, y utilizar el hidrógeno almacenado para generar electricidad durante picos de demanda eléctrica o cuando la salida de renovables es insuficiente. El proyecto se considera una solución técnica para avanzar en la transición energética, explorar alternativas a la generación de combustibles fósiles tradicionales y garantizar un suministro continuo de electricidad.










