La epidemia de gripe aviar se está extendiendo rápidamente en varios países europeos, con el número de países que reportan brotes iniciales alcanzando el nivel más alto en al menos una década, lo que genera temores en todos los sectores sobre la posibilidad de que la gripe aviar repita crisis pasadas. La gripe aviar altamente patógena, una enfermedad que representa una grave amenaza para las aves de corral, está recibiendo una atención máxima por parte de los gobiernos y la industria avícola de los países afectados. No solo podría causar estragos devastadores en las poblaciones avícolas, sino que también podría restringir las actividades comerciales e incluso representar un riesgo de desencadenar una nueva pandemia.

Al mismo tiempo, aunque el riesgo de infección humana por gripe aviar es bajo, la tendencia de transmisión del virus a mamíferos merece vigilancia. Francia ha iniciado su tercera campaña anual de vacunación contra la gripe aviar en patos de granja, convirtiéndose en el principal país exportador de aves de corral que implementa esta medida a nivel nacional. Además, la epidemia de gripe aviar también ha afectado a Estados Unidos y partes de Asia, impactando la industria avícola local y la seguridad alimentaria.