Según el "Libro Blanco sobre Almacenamiento de Energía en América Latina y el Caribe" publicado recientemente por la Organización Latinoamericana de Energía, México ha lanzado un marco de políticas ejemplar en el campo del almacenamiento de energía. Esta política requiere que las nuevas plantas de generación solar y eólica estén equipadas con sistemas de almacenamiento de energía equivalentes al 30% de su capacidad instalada, proporcionando una referencia importante para el desarrollo regional del almacenamiento de energía.

En marzo de 2025, México anunció la implementación de nuevas regulaciones de almacenamiento de energía, requiriendo que todos los nuevos proyectos solares y eólicos estén equipados con sistemas de almacenamiento de baterías con una duración mínima de descarga de tres horas. Se espera que esta política de almacenamiento de energía impulse la conexión a la red de 574 MW de nueva capacidad de almacenamiento de energía para 2028. El informe de la Organización Latinoamericana de Energía señala que la política de almacenamiento de energía de México proporciona un modelo replicable para el desarrollo de energías limpias en la región.